Dentro de las estaciones de carga de vehículos eléctricos hay diferentes niveles de carga, pero normalmente se refieren a dispositivos de modo 3 o de modo 4 cuando la gente se refiere a las estaciones de carga. En este artículo nos centraremos en los dispositivos de modo 3.
Ubicación de los cargadores de modo 3
Una estación de carga de modo 3 suele instalarse frente al aparcamiento de un hotel o un restaurante. Son cajas relativamente pequeñas con una o dos tomas en el lateral y una pequeña pero sofisticada pantalla para acceder. El nivel de potencia de estas estaciones de modo 3 es equivalente al de una secadora y funciona con un circuito de alimentación similar. Las potencias estándares de las estaciones de carga en AC son 7,5kW y 22kW.
El término "cargador" para una estación de carga de modo 3 es algo engañoso porque la parte de carga real está situada en el propio vehículo. El SAVE (Sistema de Alimentación de Vehículo Eléctrico) sirve de pasarela. Las eléctricas suministran corriente alterna (AC) a los edificios residenciales. Sin embargo, el suministro de energía de un vehículo eléctrico se nutre de la energía de la batería. La reacción química de la batería produce corriente continua (DC). Cuando un vehículo se conecta a una estación de carga, se inicia un proceso de identificación y se verifica la correcta conexión del coche. Una vez establecida la conexión segura, la estación de carga informará al vehículo de la cantidad de energía que puede consumir con seguridad de ese cargador en concreto. Una vez que el coche disponga de esa información, obtendrá la corriente alterna de la estación de carga y a través de su cargador de a bordo la convertirá en corriente continua, que alimentará la batería. Dependiendo del tamaño del cargador de a bordo así como el de la batería, del nivel de descarga y de la energía disponible en la estación de carga, este proceso puede durar unas horas. La función de control de la estación de carga incluye un circuito de comprobación de fallas a tierra que garantiza que el usuario no se electrocute durante el proceso de carga. Cuando se pasa por una estación de carga de este tipo, no suele pasar desapercibido que los cables cuelguen junto a la estación o estén en el suelo. Suelen estar expuestos a la intemperie, al tiempo que se ven afectados por el envejecimiento y, en algunos casos, por el vandalismo. Al igual que un secador de pelo con un diferencial (RCD-Residual Current Device) incorporado, la estación de carga puede integrar un RDC-DD. Se trata de dispositivos de interrupción de la corriente de carga que cumplen una función de seguridad muy parecida a la de un RDC, en caso de que se produzca una situación de peligro eléctrico.